Ingredientes:

• 12 láminas de lasaña
• 1 taza de ricotta
• 2 tazas de espinacas cocidas y picadas
• 1 taza de queso rallado (puede ser mozzarella o una mezcla)
• 1 taza de salsa de tomate
• 1/4 taza de harina
• 2 tazas de leche
• 1 cucharada de mantequilla
• Sal y pimienta al gusto

Instrucciones:

1. Precalienta el horno a 375 grados Fahrenheit.
2. Cocina las láminas de lasaña según las instrucciones del paquete y escúrrelas bien.
3. En un tazón pequeño, mezcla la harina y la mantequilla para crear un roux. Calienta el roux en una olla mediana a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente, hasta que esté espeso y tostado.
4. Agrega la leche poco a poco, revolviendo constantemente, hasta que la mezcla esté homogénea. Continúa cocinando y revolviendo hasta que la mezcla espese.
5. Agrega la salsa de tomate, la sal y la pimienta al gusto. Mezcla bien y retira del fuego.
6. En un tazón grande, mezcla la ricotta, las espinacas y 1/2 taza de queso rallado. Mezcla bien.
7. En un refractario para hornear, extiende una capa de la salsa bechamel en el fondo. Coloca 3 láminas de lasaña sobre la salsa. Agrega una capa de la mezcla de ricotta y espinacas, seguida de otra capa de salsa bechamel. Repite esta secuencia hasta que se acaben los ingredientes, terminando con una capa de salsa bechamel. Espolvorea el queso rallado restante encima.
8. Cubre con papel aluminio y cocina durante 25 minutos. Retira el papel aluminio y cocina durante 10 minutos más, o hasta que el queso esté dorado y burbujeante. Sirve caliente.

Nota: Puedes variar esta receta con otras verduras o carne magra, la idea es tener una base de lasaña y jugar con las capas.